En la Argentina siete de cada diez niños viven en la pobreza, según un estudio publicado por Unicef. Son unos 8,6 millones de chicos menores de 18 años, que viven en hogares que no alcanzan el piso mínimo de ingresos monetarios o en entornos de privación de derechos de vivienda, salud y educación, entre otros. En tanto, la indigencia infantil superó a fines de 2023 el 19%.
Según el informe, el recorte en el gasto del sector público en partidas destinadas a niñez y adolescencia es una tendencia que se verifica en los últimos años, y se profundizó en 2024. Así lo muestran los números del gasto analizado por Unicef, que refleja que el devengado para este segmento en 2023 registró una caída interanual de 10 puntos porcentuales con respecto a 2022. En otros términos, pasó de representar un 22% del PBI al 19,5% del PBI en un año.
El planteo de Unicef es el siguiente: «El crecimiento económico sostenido es condición indispensable para revertir esta situación. En 2023 tuvimos el mismo PBI per cápita que en 2007. Argentina no crece hace 11 años, y hasta que esto ocurra, tenemos que priorizar el presupuesto nacional dirigido a niñez, y en particular, las políticas de protección de ingresos» Explicó Sebastián Waisgrais, especialista en Inclusión Social y Monitoreo en Unicef Argentina, al analizar el deterioro social del país.