A una semana del doble femicidio se conoció el informe preliminar de la autopsia de la niña de 9 años asesinada junto con su hermana Isondú Maricel
El femicida está internado en Curuzú y se trabaja para trasladarlo a Monte Caseros.
Fernández de 22: no hay signos de abuso sexual reciente en el cuerpo de Aitana Fernández.
Por su parte, el acusado capturado este domingo continúa internado en el hospital de Curuzú Cuatiá, y se espera trasladarlo al hospital de Monte Caseros.
El acusado de doble femicidio, Antonio Villalba de 41 años, quien según todos los estudios que se le hicieron y los profesionales que lo examinaron se encuentra en buen estado de salud, pero no responde a la requisitoria ni de médicos ni de la fiscal. Se le estaría colocando suero ante su cuadro de deshidratación, luego de cinco días internado en el monte siendo detenido recién este domingo en horas del mediodía escondido debajo de una vivienda en construcción a unos 20 kilómetros de donde se registró la matanza, pero se niega a ingerir alimentos.
Fuentes dejaron trascender el contenido de las declaraciones de los testigos y en este marco trascendió la declaración que Miguel Ángel Zárate -pareja de Maricel Isondú Fernández- quien compareció ante la Unidad Fiscal, en el que relató que Villalba había sido obligado a irse de la vivienda por algo que Maricel habría creído ver pero que a él no le constaba. Según la declaración de uno de los testigos claves, el hecho al que se refiere sucedió el domingo 2 de junio pasado, cuando se despertó de la siesta y tras volver al dormitorio la joven le comentó que le pareció ver con los pantalones bajos a la niña, mientras jugaba afuera con Villalba.
A raíz de ello, le pidió a Zárate que le dijera a Villalba que se fuera de la casa. Al parecer, la relación más cercana de Villalba con los moradores de esa vivienda de parada Acuña era con Maricel y no con Zárate, incluso desde adolescentes. Por eso primero aceptó tener que irse, pero luego imploró al jefe de familia que no tenía dónde ir, sin un trabajo ni oportunidades de conseguirlo. Se ofreció incluso para trabajar todo el día en una construcción que, no lejos de allí, llevaban adelante Maricel y Miguel Ángel.
Maricel insistió en su postura y hasta llegó a anticiparle a Zárate que haría regresar a la niña a casa de su madre, una conversación que los investigadores creen que pudo haber escuchado Villalba, dado los espacios reducidos de la vivienda, y al día siguiente, cuando el jefe de la familia se fue a trabajar, terminaron por desatar su furia homicida.
Este dato inicial del informe médico legal, aportado a la doctora Arrúa y también al doctor Federico Gutiérrez, defensor oficial que en un primer momento tomó la investigación por una ausencia circunstancial de la fiscal, no permite, sin embargo, descartar ninguna de las hipótesis sobre las que se asienta la pesquisa pero el supuesto abuso estaría descartado. Para arrojar más luz sobre los hechos, será clave el informe final de los médicos forenses que practicaron el examen tanatológico que se realizó en Paso de los Libres pero que lleva más tiempo.
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